El director del montaje musical ‘El Mago de Oz’, que el día 2 de enero se presenta en el Auditorio de Teror, habla en esta entrevista de la producción que dirige inspirada en el clásico imperecedero que ha cautivado a cientos de miles de generaciones de medio mundo.
¿Cuáles son las mejores armas para llegar al niño: el poder de comunicación del actor o las técnicas escénicas del montaje?
Es un equilibrio entre esas dos partes. Los montajes infantiles utilizan nuevas técnicas novedosas y se hacen grandes con actores que sepan transmitir, comunicar, entender y escuchar a los niños. En las obras con público adulto existe una barrera más grande entre escena y patio de butaca. Sin embargo, en los montajes teatrales infantiles siempre hay que romper la pared entre escena y patio de butacas. El actor debe saber escuchar a los niños y hacerles partícipe dentro del hecho teatral. Los niños y los actores aprenden de verdad cuando van juntos de la mano.
¿Cuál es el atractivo de su versión de ‘El Mago de Oz’?
Hemos querido hacer una lectura del tránsito que sufre Dorothy mientras se aleja de la infancia para adentrarse en la adolescencia. Con ayuda de los amigos que irá haciendo por su periplo, emprenderá un viaje cargado de contratiempos hacia Ciudad Esmeralda, para pedir al poderoso Mago de Oz que la devuelva a su hogar. Nuestra obra contiene una historia emocional donde hay mucha magia, mucha música y muchísima comedia.
¿Cómo convencerías al público para que no se perdiera este espectáculo?
Que la acción y el entretenimiento son los principales ingredientes de este montaje, con la finalidad de que durante los 70 minutos que dura, puedan disfrutar de él desde los más grandes hasta los más pequeños. Es un musical lleno de historias y personajes, diseñado para disfrutar en familia, que cautiva y consigue arrancar las sonrisas y el aplauso del público de un modo natural.
¿Qué lección podemos extraer de ‘El Mago de Oz’?
A través de Dorothy mostramos la lucha con esos fantasmas que todos tenemos alrededor de esa hipotética certeza de que más allá de nuestra existencia se encuentra siempre un mundo mejor, hasta que crecemos y realmente nos damos cuenta de que como en casa, en ningún lugar y que lo que realmente importa es que seamos felices con lo que tenemos y nos entreguemos con los seres cercanos que nos rodean. Hay que aprender a valorar lo que tenemos y a ser felices con ello, porque eres quien eres y eres de donde eres, y eso no se puede cambiar. Hay que aprender no sólo a que eso te guste, sino que te enorgullezca.
¿Y sobre el reparto?
Sólo puedo afirmar que es uno de los mejores planteles de actores que hoy por hoy puede ofrecerse en Canarias en un espectáculo de esta naturaleza. Se trata de actores muy conocidos en la escena de la Islas como Blanca Rodríguez, en el papel de la bruja; Luifer Rodríguez, que está genial en su Mago de Oz; Maykol Hernández, que ha participado en la superproducción ‘Exodus’ y que encarna al hombre de hojalata; Mingo Ruano, que también acaba de estrenar con mucho éxito ‘Sin sombras de Grey’; Leo Medina, popular por su concurso ‘En clave de Já’ que interpreta al mono alado; Santiago Adán, que se atreve con un peculiar espantapájaros y, por supuesto, Cristina Rendón, que asume el papel de Dorothy, una actriz de 15 años que ya la hemos visto en la película de Ado Santana, ‘Treinta monedas’. Ella es fresca, inteligente e ingenua y canta estupendamente.
¿QUIÉN ES VÍCTOR FORMOSO?
Nace en Las Palmas en 1983. A los 18 años se traslada a Madrid donde cursa los estudios de Arte Dramático en la University of Kent At Canterbury, en Torrelodones. Allí se forma en el campo de la interpretación con maestros como Jesús Salgado, Vicente León y Luis D’Ors.
Al terminar los estudios y con 23 años, vuelve a su ciudad natal y se introduce en el mundo del teatro de manos de la consolidada compañía canaria Profetas del Mueble Bar, con quienes realiza una extensa gira a nivel regional y nacional, recalando en los festivales de teatro clásico de Almagro y Peñíscola y haciendo temporada en el Teatro Galileo de Madrid. Juegos de Amor y de Azar se convierte en su primer trabajo teatral relevante y el que le situará en el panorama teatral isleño.
Empieza a trabajar en otras compañías relevantes como 2RC Teatro, donde es dirigido por Carlos Alonso Callero. Los Mares Habitados, trabajo poético donde baila la palabra y el cuerpo, fue nominada al espectáculo revelación de los premios Max 2010, y ganadora del Premio Réplica al mejor espectáculo de 2009. Años más tarde volvería a trabajar para la misma compañía en el clásico Abre el Ojo, dirigida por Rafael Rodríguez y con la colaboración de José Luis Massó y Paco Rojas. Entre las funciones relizadas cabe destacar las del Festival de Teatro Clásico de Almagro y el de Olmedo de 2012.
Pasa a formar parte del elenco de la compañía Clapso, capitaneada por Israel Reyes, con el espectáculo Reyes que Amaron Como Reinas, con el que consigue consolidarse como un actor solvente en la escena canaria, y trabaja en otras muchas producciones con la compañía, la última y más reciente: Perdona bonita pero Lucas me quería a mi, basada en la afamada película del mismo título y escrita por Félix Sabroso y Dunia Ayaso.
Una de sus mayores satisfacciones profesionales la consigue con Tú Tira Que Yo Empujo y Cuack, dos espectáculos sencillos y carismáticos de teatro Clown, coproduccidos, dirigidos e interpretados por José Carlos Campos y él, con los que han conseguido enamorar y hacer reír a miles de personas.
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