Las calles El Greco, Valencia y el Callejón peatonal se transformarán en una plataforma única en la que primarán la accesibilidad del peatón frente a los vehículos
“Pretendemos convertir el frente marítimo de la Playa de El Reducto en una zona de crecimiento de la actividad económica, lúdica y de esparcimiento de la ciudad, pensando, como siempre, en la movilidad y la compatibilidad entre coches y peatones”.
La alcaldesa de Arrecife, Astrid Pérez, y el concejal de Urbanismo, Eduardo Placeres han presentado esta mañana en rueda de prensa un nuevo proyecto de modelo de ciudad para ejecutar dentro del proceso de transformación del frente marítimo de Arrecife con la finalidad de convertir la zona de la playa de El Reducto en un área de desarrollo económico en la que convivan peatones y automóviles.
La obra, cuyo plazo de presentación de ofertas de licitación culmina el próximo lunes 29 de noviembre, tiene un presupuesto de 369.349,97 euros, un plazo de ejecución de 4 meses, y supondrá la mejora de las calles El Greco y Valencia con la adecuación de aceras, la plantación de arbolado, colocación de mobiliario urbano y la instalación de alumbrado público nuevo.
Al igual que el proyecto presentado hace unas semanas de la calle Canalejas, también en el centro de la ciudad y cerca del frente marítimo de Arrecife, el proyecto que hoy se ha dado a conocer pretende convertir esas calles en una plataforma única en la que se dará prioridad al peatón frente a los vehículos.
Plataforma única y velocidad de 20 Km/h
En las calles con una tipología de plataforma única apenas hay desnivel entre las aceras y la calzada, exceptuando un dos por ciento de pendiente donde se instalarán los imbornales para el drenaje del agua de lluvia, una actuación que acabará con las filtraciones que se producen a los edificios colindantes en épocas de lluvia.
El proyecto que hoy se presenta contempla para la calle El Greco unas aceras que se alternan desde los 1,90 metros hasta los 2,68 de ancho en función de la línea de los edificios, mientras que los aparcamientos serán de 2,00 metros de ancho y el carril de circulación de 3,00 metros.
En el caso de las aceras de la calle Valencia estas tendrán unas dimensiones de 2,47 metros de ancho, y de 3,00 metros para la circulación de los vehículos, mientras que El Callejón, que tiene salida a la Avenida Fred Olsen que limita la playa de El Reducto, tendrá un ancho totalmente peatonal de 2,30 metros.
La circulación de los coches se limitará a 20 Km/h como máximo ya que se establece como zona de uso residencial, y además se estacionará en los lugares designados para tal efecto. Además, el pavimento cumple con la normativa para el uso de personas con movilidad reducida, y también se contempla la ubicación de dispositivos para el aparcamiento de bicicletas.
Red de pluviales y de riego
Las obras, a pesar de no llevar dificultad técnica, que puedan demorar su ejecución o incrementar su presupuesto, contemplan la demolición del pavimento peatonal existente y la capa de rodadura, la instalación de alumbrado público, red de riego y pluviales, jardinería y renovación de la señalización vial y de luminarias.
Astrid Pérez, alcaldesa de Arrecife,: “Pretendemos convertir el frente marítimo de la Playa de El Reducto en una zona de crecimiento de la actividad económica, lúdica y de esparcimiento de la ciudad, pensando, como siempre, en la movilidad y la compatibilidad entre coches y peatones”.
Actualmente, las calles El Greco, el Callejón y Valencia presentan un deterioro que ha sido paulatino por el transcurso del tiempo, sin que se hayan arreglado en años, “de ahí que sea objetivo del actual grupo de Gobierno municipal desarrollar las condiciones básicas para que estas vías sean accesibles para todo tipo de peatones”, según apunta la alcaldesa de la capital, Astrid Pérez.
Con esas obras las calles tendrán una tipología única, no habrá desnivel prácticamente entre las aceras y la calzada, se le dará prioridad al peatón respecto a los vehículos, lo que convertirá la zona, gracias al incremento de comercios orientados al turismo, y de la oferta de restauración existente en una de las zonas de mayor crecimiento económico de la capital.
Además, con el diseño de la nueva red de riego se pretende dotar de estabilidad hídrica al nuevo arbolado que irá en la zona, principalmente especies como la Cheflera Bicolor o la Eugenia Myrtifolia
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