Placas con la historia de las víctimas del pesquero Cruz del Mar

Arrecife repone las placas con la historia de las víctimas del pesquero Cruz del Mar

El Ayuntamiento de Arrecife recupera la memoria histórica de los pescadores asesinados en 1978, con la reposición de las placas sustraídas junto al Monumento ‘La luz que nos guía’, obra de Juan Brito.

El Ayuntamiento de Arrecife, bajo la dirección del alcalde Yonathan de León, ha completado durante el mes de julio los trabajos de reposición de las placas conmemorativas en honor a los siete pescadores de Lanzarote asesinados en el atentado al pesquero Cruz del Mar en 1978.

Las placas, que habían sido sustraídas meses atrás, vuelven a estar visibles junto al Monumento en Porto Naos, una estructura diseñada por Juan Brito como faro simbólico que honra a las víctimas del terrorismo marítimo.

La intervención municipal incluyó además labores de embellecimiento y mantenimiento del entorno en el paseo marítimo, asegurando que este lugar de memoria recupere su valor histórico, social y patrimonial. Los trabajos se realizaron con cargo al presupuesto municipal, como decisión directa del alcalde y concejal responsable del área de Obras Públicas.

Recuerdo a las víctimas

El recuerdo a las víctimas —Amador Hernández, Chano Cañada, Alfredo Marrero, Juan Suárez, Agustín Hernández, José María Hernández y Rafael Salas— se ha integrado este año en el programa de las Fiestas de la Virgen del Carmen, patrona de los marineros, con una ofrenda floral y acto institucional desarrollado junto al monumento, con la participación de la Corporación Municipal, la Asociación Cruz del Mar, familiares de las víctimas y vecinos de la isla.

También formó parte del acto la Parranda Marinera de Los Buches, en una jornada que precede a la tradicional procesión marítima de la Virgen del Carmen, que este año volverá a realizar su embarque desde el Puerto de Naos tras su paso simbólico por el espacio conmemorativo.

Con esta actuación, el Ayuntamiento de Arrecife refuerza su compromiso con la preservación de la memoria histórica local y el homenaje permanente a los hombres del mar que perdieron la vida en uno de los episodios más trágicos de la historia reciente de Lanzarote.