Verano en Lanzarote: mucho más que sol y mar
Con la llegada de julio, Lanzarote entra de lleno en su temporada más vibrante. Conciertos, fiestas patronales, noches de verbenas y hasta cine bajo las estrellas marcan una temporada alta también en lo cultural y lo popular. El verano ya está aquí y la isla cambia de ritmo.
La inauguración oficial, como cada año, llegó con la noche de San Juan. Aunque el tiempo no acompañaba por el fuerte viento, muchas playas se llenaron de hogueras y asaderos populares en una de las noches más mágicas del año, en la que la diversión y la superstición van de la mano. Hasta hace pocos años, el día de San Juan era festivo, y los mayores cuentan que antes de la llegada del turismo en los años 60, las labores del campo se terminaban antes para poder disfrutar de esta fiesta en familia y con amigos.
Hoy lo siguen haciendo, aunque de manera más controlada por cada ayuntamiento, para evitar percances. Los lanzaroteños compartieron asaderos con chuletas, sardinas y piñas asadas alrededor del fuego, saltaron hogueras y quemaron papeles en los que habían escrito sus deseos. Y para muchos, tampoco pudo faltar esa noche otro ritual purificador: el primer baño oficial del año, ya que antiguamente se creía que bañarse antes de esa fecha podía atraer la mala suerte.
El Cine Ambulante de Verano volverá a convertir un año más plazas y explanadas en cines bajo las estrellas
La noche de San Juan tiene sus raíces en la antigüedad, cuando se rendía tributo al solsticio de verano para purificar el sol y darle fuerza a medida que los días se acortan, pero Lanzarote le ha ido aportando su propio sello. Y muy especialmente lo ha hecho Haría, que volvió a celebrar esa noche el día grande de las fiestas en honor a su patrón, San Juan Bautista, con la quema del Facundo y la danza de sus Diablos, que añaden un toque de misterio y diversión a la celebración.
Cine ambulante
Otra de las propuestas que mejor conecta con ese espíritu de tradición compartida, pero adaptada a los tiempos actuales, es el Cine Ambulante de Verano, que regresa a la isla en su cuarta edición. Organizado por la asociación Tenique Cultural, en colaboración con el área de Cultura del Cabildo y los siete ayuntamientos de la isla, recorrerá la isla entre los meses de julio y agosto.
El objetivo de esta iniciativa es llevar el cine a plazas, canchas y explanadas de todos los municipios, recuperando la esencia de aquellas antiguas proyecciones al aire libre donde lo importante no era solo la película, sino la experiencia de verla en comunidad, bajo las estrellas y junto a vecinos y amigos. Y la gran acogida de la última edición -que “superó las expectativas” de los organizadores, con cifras récord de asistencia y una media de 200 personas por proyección-, augura un nuevo éxito este verano.

Conciertos, fiestas patronales, verbenas y hasta cine al aire libre marcan el ritmo de la isla en la temporada estival
Con una cuidada selección de películas -pensadas tanto para públicos familiares como para cinéfilos curiosos-, cada sesión se convierte en una pequeña celebración del encuentro. Antes de cada proyección, se ofrece una breve presentación que contextualiza el filme, resaltando su valor cultural o su relevancia temática, y después se celebra un coloquio, que es lo que más valora el presidente de Tenique Cultural y director del Cine Ambulante de Verano, Javier Fuentes Feo. “Ver a sesenta o setenta personas quedarse después de dos horas de proyección para dialogar sobre lo que han visto es algo realmente conmovedor, que nos gratifica y estimula a continuar con el proyecto”, afirmaba tras la última edición.
Y es que el Cine Ambulante de Verano no es solo un entretenimiento veraniego, sino una apuesta por una cultura accesible, cercana y compartida. En mitad del calor estival, ofrece un respiro que combina arte, aire libre y comunidad. Una forma más de vivir la isla con otro ritmo.
Ritmos de vida
Antes incluso de que se iniciara formalmente el verano, Costa Teguise ya le había dado su particular pistoletazo de salida con otro evento que se ha consolidado en el calendario de la isla: el festival Bio Ritmos. La cita, celebrada el pasado viernes 13 de junio, volvió a convertir el anfiteatro de la plaza de Las Cucharas en un cruce de caminos musicales y culturales, ofreciendo una noche vibrante de músicas del mundo, identidad y mestizaje.
En esta edición, el cartel lo encabezó Milladoiro, histórica formación gallega de música celta que demostró por qué sigue siendo referencia internacional tras más de cuarenta años sobre los escenarios. Le acompañaron la voz carismática de Marta Bolaños al frente del proyecto Makasi, que exploró las conexiones culturales entre Canarias, Cabo Verde, Madeira o Azores, fusionándolas con elementos de músicas africanas; y la propuesta de raíz contemporánea de Contraventura, el proyecto de David Rodríguez ‘El Majorero’, que hizo vibrar el timple y la contra majorera con una sensibilidad renovadora.
Más allá de los nombres, lo que hace especial a Bio Ritmos es su atmósfera. El festival se celebra en un enclave natural privilegiado, frente al mar, y crea una conexión casi mágica entre músicos y público. La gente se deja llevar por los sonidos, y no es raro ver a más de uno bailando descalzo sobre la piedra de la plaza, dejándose envolver por los tambores, las flautas, las cuerdas y los aplausos. Este año, además, la comparsa local Cumbacheros animó los interludios entre actuaciones, aportando ritmo y colorido en cada transición.
Lava en vivo
En Arrecife, el verano también se adelantó con los primeros conciertos del Lava Live Lanzarote Music Festival. El evento, que celebra este año su segunda edición, presume de ser “el festival más ambicioso de la isla”, desplegando cuatro jornadas de conciertos en dos fines de semana -13 y 14 de junio y 25 y 26 de julio- con aforo para 18.000 personas por jornada.

El arranque no decepcionó: el viernes 13 llevaron el ritmo urbano Residente y Orishas, mientras que la noche del sábado 14 marcó un momento histórico con la actuación de Maná, que subió al escenario con un recinto lleno a rebosar. Las puertas se abrieron a las 17:00 horas y tras la actuación del grupo lanzaroteño Drûpe y de los valencianos Los Zigarros, el grupo mexicano inició su concierto sobre las 21:30 horas, ofreciendo un repaso emocional y enérgico a sus grandes éxitos.
Ahora, se acercan las otras dos grandes citas. El 25 de julio será el turno de Steve Aoki, Rels B, Justin Quiles, Luck Ra y Sumaya Vb; y el 26 de julio subirán al escenario Kapo, St. Pedro, Toni Bob y Estopa, cerrando su gira ‘Estopa Fest 2025’, en una noche que promete despedir por todo lo alto esta edición del Lava Live.
La esencia, en las fiestas
Más allá de los grandes escenarios y los festivales de renombre, el verdadero pulso del verano en Lanzarote late en sus pueblos. De norte a sur, la isla se transforma en una sucesión de fiestas patronales que marcan el calendario estival con procesiones, verbenas, torneos de bola y un sinfín de actividades de ocio y cultura. Son celebraciones donde la tradición sigue viva y donde el vecino es protagonista.

La noche de San Juan prendió la mecha del verano entre hogueras, chuletas y rituales a la orilla del mar
Junio es solo el preludio. Haría abrió la temporada con sus Fiestas de San Juan, pero el mes de julio llega cargado con las celebraciones de San Marcial en Femés, San Pedro en Mácher, San Francisco Javier en El Islote o la Virgen del Carmen en La Tiñosa, Valterra y Caleta de Sebo. Esta última es especialmente significativa para los marineros de la isla, que rinden homenaje a su patrona con una procesión marítima de barquillos engalanados, sirenas sonando y pétalos sobre el mar.
Agosto se presenta aún más apretado. San Roque en Tinajo, San Ginés en Arrecife y San Bartolomé en el municipio homónimo llenan las calles de actividades para todos los públicos: desde concursos de postres hasta competiciones deportivas, pasando por bailes de taifa, luchadas y conciertos multitudinarios en plazas convertidas en auténticos recintos festivos. Las papahuevadas, los juegos tradicionales y los castillos hinchables conviven con los fuegos artificiales, el olor a churros y el sonido de la batucada.
Septiembre no baja el ritmo. La Candelaria en Tías y las fiestas de Dolores en Mancha Blanca ponen el broche de oro a un verano que, en Lanzarote, se celebra de pueblo en pueblo. Y aunque cada uno tiene su forma particular de festejar, todos comparten un mismo espíritu: el de mantener vivas las costumbres y hacer de cada celebración una excusa perfecta para reencontrarse.
Punto de encuentro juvenil
La música, como no podía ser de otra forma, es columna vertebral de las fiestas. Y en todas se programan actuaciones adaptadas a los gustos de los más jóvenes, aunque en este caso no importa tanto el cartel, como tener un punto de encuentro que reúne a adolescentes de toda la isla.
Las fiesta de San Ginés, sin duda, son ejemplo de ello, pero hay muchos más, porque la mayoría de los jóvenes pasan el verano desplazándose de pueblo en pueblo, en busca de ocio nocturno en esas verbenas festivas. De norte a sur y desde localidades turísticas como Puerto del Carmen hasta lugares con identidad local como Famara, que es cita obligada para buena parte de la juventud.
El pasado año, la “zona alternativa” del llano de Caleta de Famara congregó a miles de jóvenes, y el Ayuntamiento de Teguise y el Cabildo refuerzan cada año la seguridad, con un despliegue conjunto de Policía Local, Guardia Civil y Protección Civil que vela por el orden en estas fiestas cada vez más multitudinarias, que no están exentas de quejas vecinales. En total, en 2024 unas 14.000 personas asistieron a los distintos actos celebrados en esta pequeña localidad.
El otro verano
El verano en Lanzarote también se disfruta sin focos ni escenarios. Las playas siguen siendo el mejor refugio para escapar del calor. Desde las más frecuentadas hasta calas más tranquilas, esas que los residentes prefieren no compartir demasiado. Los mercadillos al aire libre también invitan a caminar sin prisas y las terrazas, que se llenan al caer la tarde, sirven para terminar el día con calma, un buen vino de la tierra y un rato de charla.
Y para quienes buscan algo más íntimo, la isla sigue ofreciendo silencio: un paseo por La Geria al atardecer, un baño a última hora en el Charco del Palo o una caminata por senderos que cruzan volcanes. Porque el verano no es solo una estación para descansar, también es una oportunidad para redescubrir la isla a otro ritmo.
Un verano de cine: de ET a La odisea de los giles

“Todas las estaciones son buenas para la cultura y en verano es necesario pensar cómo lograr que la cultura le llegue y le apetezca a la gente aún más”
“Todos los periodos del año son buenos para la cultura y el verano, por supuesto, también”. Así afronta la temporada estival el presidente de Tenique Cultural, Javier Fuentes Feo, que cree que en esta época “es necesario intentar pensar cómo puedes lograr que la cultura le llegue y le apetezca a la gente aún más”.
Con esa idea impulsó el Cine Ambulante de Verano, que este año cumple su cuarta edición. “Es un intento de mezclar entretenimiento, encuentro comunitario y ambiente veraniego con diálogo, debate y escucha. Por eso siempre hacemos una breve presentación de cada película y mantenemos un debate al finalizar las proyecciones”, explica.
El objetivo es “hacer del punto ocioso del cine de verano un encuentro para el aprendizaje”; y aunque al principio temían que la gente no se animara a hablar en esos debates, Fuentes afirma que en todas las ediciones “ha sido increíble la participación tras las proyecciones”.
Para la selección de las películas, buscan que sean “interesantes para públicos muy diversos” y que combinen “entretenimiento e interés cultural”. En esta ocasión, explica que la cartelera incluye “títulos muy populares, como ET, Karate Kid o El informe pelícano, en los cuales se observan muchas de las cuestiones políticas o sociales que marcaron los años ochenta y noventa”; pero también “películas menos conocidas pero inteligentes y divertidas, como La odisea de los giles, El nombre de la rosa o Un pez llamado Wanda”.
“Hemos elegido catorce títulos de los cuales la mitad son americanos y la otra mitad de otros lugares del mundo, para poner una vez más en valor que hay cine ameno e interesante en muchos países del mundo”, precisa Javier Fuentes. Además, aunque lamenta que el ratio de mujeres en la dirección cinematográfica es “por desgracia” muy inferior al de los hombres, subraya que siempre incorporan también directoras de cine en la selección.
Programa
Arrecife
Plaza Pedro Alcántara (La Harinera)
3 de julio, 21:00 h: Última llamada
4 de julio, 21:00 h: Odisea de los Giles
Tinajo
Teleclub de La Vegueta
10 de julio, 21:00 h: E.T.
11 de julio, 21:00 h: Un pez llamado Wanda
Haría
Cancha del Teleclub de Punta Mujeres
17 de julio, 21:00 h: Wall Street
18 de julio, 21:00 h:Una segunda madre
San Bartolomé
Canchas traseras del Centro Cívico de Playa Honda
24 de julio, 21:00 h: El Viaje de Chihiro
25 de julio, 21:00 h: Karate Kid
Teguise
Trasera del Teleclub de Famara
31 de julio, 21:00 h: Shrek
1 de agosto, 21:00 h: El nombre de la rosa
Yaiza
Plaza del Mercado Agrícola de Uga
7 de agosto, 21:00 h: La huella
8 de agosto, 21:00 h: El informe pelícano
Tías
Plaza Ermita de San Antonio
14 de agosto, 21:00 h: Tres días con la familia
15 de agosto, 21:00 h: Arde Missisipi