El escritor y profesor Miguel Aguerralde, afincado en Lanzarote, se sumerge en el universo juvenil y musical de los años noventa, de la mano de la joven editorial Siete Islas, para ofrecernos su novela más personal hasta la fecha.
Hablamos de La chica que oía canciones de Kurt Cobain, un trabajo muy esperado que el autor define como “una novela musical y referencial” y con la que pretende regresar a “esos años de cambio y desorientación, de reorganizar nuestro mundo, que todos debemos superar cuando somos adolescentes”.
En el caso de Miguel Aguerralde, ese paso por la adolescencia tuvo lugar en la primera mitad de la década de los noventa, coincidiendo con el trágico suicidio del icónico cantante de Nirvana, Kurt Cobain. En esta nueva aventura literaria, Aguerralde viaja en el tiempo a 1994 y nos traslada a una ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, muy diferente de la actual en muchos aspectos. Un contraste cultural, social y vital que convierte La chica que oía canciones de Kurt Cobain en una experiencia personal, más allá de una novela.
Se trata de un libro “difícil de clasificar”, -tal y como reconoce su autor-, ya que entre fragmentos de recuerdos personales y de vivencias reales, el autor toca lo romántico, lo juvenil y el drama adulto, pero también el suspense y el misterio, a través de una historia de amor que abarca tres décadas. Una novela diferente que cuenta con un arduo trabajo de investigación y documentación para apelar a la nostalgia y al amor por la música, el cine, los videojuegos y la iconografía de una época irrepetible.
La chica que oía canciones de Kurt Cobain es la nueva apuesta de la joven editorial Siete Islas, que ya cuenta entre su catálogo con el libro de relatos Sandalias de Plata, de la escritora Pepa González, y con las novelas La Sirena de Famara, La Isla de los Dragones Dormidos y La Leyenda de Gara y Jonay, del autor Ismael Lozano.
Ya se puede encontrar a la venta La chica que oía canciones de Kurt Cobain, un divertido y original estudio sobre el amor, sobre los reveses de la vida, sobre el paso a la madurez y sobre aquello que Nirvana bautizó para siempre como el “aroma del espíritu adolescente”.
Sinopsis
Seguro que tú también recuerdas la primavera del noventa y cuatro. Una época de amistad, de ilusiones, de los primeros amores y las decepciones más crueles. Y recordarás cómo el suicidio del líder de Nirvana sacudió el mundo de la música y lo truncó para siempre. Así fue también para mí, entonces veinte años más joven, y ahora quiero contarte cómo descubrí, entre tigretones, chicles de a duro, programas del ‘Un, dos, tres’ y a golpe de beso y guitarra, que la vida era mucho más que una partida de videojuego. Quiero contarte cómo irrumpió en mi vida y cómo cambió mi universo la chica que oía canciones de Kurt Cobain.
Esta es la historia de cómo el primer amor pone patas arriba las piezas de nuestro tablero, de cómo la música alimenta nuestro corazón y de esos recuerdos que vuelven a visitarnos cuando menos lo esperamos. Es la novela musical que entre guiños y referencias homenajea dos épocas, la actual y los años noventa, y que te llevará de regreso a un momento vital irrepetible, embebido de ese aroma de espíritu adolescente.
La chica que oía canciones de Kurt Cobain, de Miguel Aguerralde, porque el primer amor lo cambia todo.
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